Reiki, es una transferencia fuerza vital por imposición de las manos. Podemos utilizarla para ayudarnos a nosotros y a los demás. La palabra Reiki (Rei=universal, sin límite y Ki=energía vital), tanto la palabra Reiki, como la técnica, son de origen Japonés, aunque la práctica y la transferencia de esta técnica viene de muchas religiones y culturas ancestrales.

Milao Usui nació el 15 de agosto de 1865 en Yago Japón. Se le envió a una corta edad a un monasterio budista. Alrededor de 1914, tras muchos años de investigación buscando un modo de conectar con la energía, se sentó a meditar en un monte considerado sagrado, el Kuruma Yama. Tras un periodo de meditación y ayuno de 21 días, recibió la información que buscaba para completar su sistema de sanación natural.

Se basaba en la medicina oriental que usaba símbolos, afirmaciones y empleaba posiciones de las manos sobre importantes puntos de acupuntura.

En 1922 creó una clínica-escuela en Tokio y posteriormente viajó a otras ciudades para promover el Reiki..

Usui fundó una Asociación en Japón de la cual fue presidente que subsiste en la actualidad.

Su principal discípulo fue Chujiro Hayashi, médico nacido en 1878. Organizó la enseñanza del Sistema Reiki en niveles.

En 1935 conoció a la que sería su sucesora la Sra. Takata, americana de origen japonés que difundió el Reiki en occidente y residió en Estados Unidos hasta su fallecimiento en 1980.

Cualquier persona, tiene energía Reiki y todos podemos utilizarla para ayudarnos a nosotros mismos y a los demás. No se requiere ninguna condición especial para usar el Reiki ya que es un poder que se activa por iniciaciones o sintonizaciones, diferenciándolo así de otras técnicas de sanación.